Lo que me sedujo de esta versión de Los Justos fue precisamente su texto, su reflexión y la profundidad que abarcan sus personajes. Cinco personajes forman parte de un comando, de una idea, de un objetivo común: atentar contra un alto cargo del estado español. Pero esa misma ejecución genera un conflicto de ideas y de pura raíz.
Cómo cinco individuos que no solo creen en la misma causa si no que están dispuestos a poner su vida al servicio de ella están tan alejados en el fondo y en la forma, cómo el paso del tiempo dentro de la lucha clandestina mella en el alma de ellos de una forma distinta, y lo mas importante, como el autor deja constancia de que la violencia entierra a la propia idea.
Considero justo acercar al público a esta historia. Una historia compleja, de años de recorrido y que en la gran parte de este país no se conoce bien ni ha interesado que se conozca. Lo demás todos lo sabemos, la violencia es ilegitima , pero detrás de eso hay mucho más, entre otras cosas una dictadura de 40 años y un nacionalismo vasco que con el transcurso de los años no se ha unificado.
Alex Gadea.
lunes, 15 de julio de 2013
Motivaciones (2)
Publicado por
611 Teatro
a las
7:32
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